Editorial
En el primer número de nuestro boletín tenemos que dedicarnos casi monográficamente a los distintos efectos jurídicos que la pandemia del COVID-19 está provocando en las relaciones del mundo inmobiliario. No cabe la menor duda que la suspensión de las actividades por parte del Gobierno y la incertidumbre de cómo será la recuperación sanitaria va a dar lugar a una crisis económica sin precedentes. Esto afecta de una forma directa a todos aquellos contratos que se habían firmado antes, bajo unas condiciones que no hacían prever lo que está sucediendo. Nuestro consejo es que, independientemente de la parte del contrato en la que nos encontremos, contemos con un buen asesoramiento jurídico.


